¡Madre mía! Mirad este gráfico de KAITO. Subiendo como la espuma mientras yo aquí sentado mirando cómo otros se hacen ricos. +6.48% en un día y yo sin haber metido ni un céntimo. Siempre me pasa igual, veo estas oportunidades y me quedo paralizado.
Los precios fluctúan como montañas rusas y yo siempre entro en el punto más alto. Ya me ha pasado con otras monedas - entro y cae, salgo y sube. Es como si el mercado tuviera algo personal contra mí.
Un amigo me dijo ayer que había multiplicado su inversión por diez con esta moneda. ¿Y yo qué hice? Nada. Como siempre. Viendo cómo el barco zarpa mientras sigo en el muelle con mi patético capital.
Este mercado es un casino salvaje donde unos pocos elegidos parecen tener información privilegiada. Mientras tanto, los pequeños inversores como yo nos quedamos con las migajas.
¿Alguien más está sufriendo con KAITO o soy el único idiota que no sabe cuándo entrar? Quizás debería confiar más en mi instinto la próxima vez, en lugar de quedarme mirando las gráficas hasta que sea demasiado tarde.
Aviso: Contiene opiniones de terceros. No es consejo financiero. Puede incluir contenido patrocinado.
Esta página puede contener contenido de terceros, que se proporciona únicamente con fines informativos (sin garantías ni declaraciones) y no debe considerarse como un respaldo por parte de Gate a las opiniones expresadas ni como asesoramiento financiero o profesional. Consulte el Descargo de responsabilidad para obtener más detalles.
¡$KAITO! ¿Qué clase de diversión es esta?
¡Madre mía! Mirad este gráfico de KAITO. Subiendo como la espuma mientras yo aquí sentado mirando cómo otros se hacen ricos. +6.48% en un día y yo sin haber metido ni un céntimo. Siempre me pasa igual, veo estas oportunidades y me quedo paralizado.
Los precios fluctúan como montañas rusas y yo siempre entro en el punto más alto. Ya me ha pasado con otras monedas - entro y cae, salgo y sube. Es como si el mercado tuviera algo personal contra mí.
Un amigo me dijo ayer que había multiplicado su inversión por diez con esta moneda. ¿Y yo qué hice? Nada. Como siempre. Viendo cómo el barco zarpa mientras sigo en el muelle con mi patético capital.
Este mercado es un casino salvaje donde unos pocos elegidos parecen tener información privilegiada. Mientras tanto, los pequeños inversores como yo nos quedamos con las migajas.
¿Alguien más está sufriendo con KAITO o soy el único idiota que no sabe cuándo entrar? Quizás debería confiar más en mi instinto la próxima vez, en lugar de quedarme mirando las gráficas hasta que sea demasiado tarde.
Aviso: Contiene opiniones de terceros. No es consejo financiero. Puede incluir contenido patrocinado.