BRICS Pay y la evolución del sistema monetario digital: Un desafío al dominio del dólar

Octubre 2025. Momento crucial para BRICS Pay y su moneda digital común. Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica siguen avanzando en esta iniciativa disruptiva. Buscan alejarse del dólar. También del sistema SWIFT en el comercio internacional.

BRICS Pay: Una plataforma en evolución

La plataforma sigue creciendo. Blockchain como base. Facilita pagos sin efectivo entre países miembros. Segura. Transparente. La interoperabilidad entre monedas nacionales es su gran ventaja. Ya no necesitan convertir a dólares.

Parece que los avances con códigos QR van mejor de lo esperado. La compatibilidad con sistemas de pago globales mejora. Cada nación adapta el sistema a su manera. Funciona.

Hacia un sistema financiero más equitativo

El corazón de BRICS Pay no ha cambiado. Quieren justicia financiera global. Es fascinante observar esta competencia actual. Estados-Nación contra monedas digitales contra corporaciones. Todo está cambiando. No quieren eliminar monedas nacionales, eso está claro. Más bien crear una red sin interferencias externas.

La moneda digital de BRICS: Avances y perspectivas

La moneda "Unir" todavía no existe completamente. Las predicciones iniciales fueron algo optimistas. Las conversaciones continúan, eso sí. En la cumbre de julio 2025 reafirmaron su compromiso. Fechas concretas? No hay.

Datos interesantes: casi la mitad del comercio entre estos países ya usa monedas locales. El yuan domina. Las propuestas técnicas van por dos caminos: respaldo en oro o plataformas digitales transfronterizas. El proyecto mBridge cambió bastante desde que el Banco de Pagos Internacionales se fue. No está del todo claro por qué.

Implicaciones para el ecosistema financiero global

BRICS Pay podría transformarlo todo. O no. La potencial moneda común representa un cambio significativo. Una red resistente a presiones políticas atrae a muchos. Nuevos jugadores podrían entrar en la economía digital.

Las monedas locales ganan protagonismo. Los BRICS no se rinden. Quieren un sistema más inclusivo. Adaptado a nuestros tiempos. La gran pregunta sigue ahí, flotando: ¿estamos listos para un mundo económico realmente multipolar? Medio desconcertante pensarlo.