Llevo meses investigando sobre este supuesto sistema que promete acabar con toda la corrupción financiera y, sinceramente, me cuesta creerlo. El famoso QFS, que muchos presentan como la solución definitiva contra el sistema SWIFT, me parece más un cuento de hadas que una realidad palpable.
¿De verdad alguien piensa que las élites financieras permitirían un sistema que elimine su capacidad de manipulación? ¡Venga ya! No existe una sola prueba concreta de que este sistema esté operativo o vaya a estarlo pronto. Me frustra ver cómo muchos se aferran a esta idea sin cuestionarla.
Desde mi experiencia en el sector tecnológico, sé que la computación cuántica y la IA avanzan rápidamente, pero de ahí a crear un sistema financiero completo que desbanque a SWIFT hay un abismo. Los bancos tradicionales están aterrorizados ante cualquier cambio que amenace su poder, por eso van tan despacio con las CBDC.
He hablado con varios desarrolladores que trabajan en proyectos blockchain y todos coinciden: las instituciones financieras solo adoptan las partes de esta tecnología que les permiten mantener el control. La idea de un sistema completamente transparente y sin intermediarios va contra todo lo que han construido durante siglos.
¿Y qué pasa con los plazos? Nadie sabe cuándo podría implementarse algo así. Los bancos hablan de sistemas cuánticos y blockchain mientras siguen cobrando comisiones abusivas y manipulando mercados.
La verdadera revolución no vendrá de un sistema mágico caído del cielo, sino de alternativas descentralizadas que ya existen y que debemos potenciar. Mientras esperamos este QFS mitológico, los mercados cripto siguen evolucionando sin esperar permiso de nadie.
La integración de tecnologías cuánticas podría aportar beneficios, claro, pero siempre bajo el control de los mismos de siempre. No nos engañemos: cualquier sistema permitido por los reguladores actuales mantendrá sus privilegios.
El futuro es incierto, pero una cosa tengo clara: no será tan bonito como nos pintan los defensores del QFS. La verdadera batalla se libra ahora, con las herramientas que ya tenemos a nuestra disposición.
Esta página puede contener contenido de terceros, que se proporciona únicamente con fines informativos (sin garantías ni declaraciones) y no debe considerarse como un respaldo por parte de Gate a las opiniones expresadas ni como asesoramiento financiero o profesional. Consulte el Descargo de responsabilidad para obtener más detalles.
El Sistema Financiero Cuántico: ¿Revolución o fantasía?
Llevo meses investigando sobre este supuesto sistema que promete acabar con toda la corrupción financiera y, sinceramente, me cuesta creerlo. El famoso QFS, que muchos presentan como la solución definitiva contra el sistema SWIFT, me parece más un cuento de hadas que una realidad palpable.
¿De verdad alguien piensa que las élites financieras permitirían un sistema que elimine su capacidad de manipulación? ¡Venga ya! No existe una sola prueba concreta de que este sistema esté operativo o vaya a estarlo pronto. Me frustra ver cómo muchos se aferran a esta idea sin cuestionarla.
Desde mi experiencia en el sector tecnológico, sé que la computación cuántica y la IA avanzan rápidamente, pero de ahí a crear un sistema financiero completo que desbanque a SWIFT hay un abismo. Los bancos tradicionales están aterrorizados ante cualquier cambio que amenace su poder, por eso van tan despacio con las CBDC.
He hablado con varios desarrolladores que trabajan en proyectos blockchain y todos coinciden: las instituciones financieras solo adoptan las partes de esta tecnología que les permiten mantener el control. La idea de un sistema completamente transparente y sin intermediarios va contra todo lo que han construido durante siglos.
¿Y qué pasa con los plazos? Nadie sabe cuándo podría implementarse algo así. Los bancos hablan de sistemas cuánticos y blockchain mientras siguen cobrando comisiones abusivas y manipulando mercados.
La verdadera revolución no vendrá de un sistema mágico caído del cielo, sino de alternativas descentralizadas que ya existen y que debemos potenciar. Mientras esperamos este QFS mitológico, los mercados cripto siguen evolucionando sin esperar permiso de nadie.
La integración de tecnologías cuánticas podría aportar beneficios, claro, pero siempre bajo el control de los mismos de siempre. No nos engañemos: cualquier sistema permitido por los reguladores actuales mantendrá sus privilegios.
El futuro es incierto, pero una cosa tengo clara: no será tan bonito como nos pintan los defensores del QFS. La verdadera batalla se libra ahora, con las herramientas que ya tenemos a nuestra disposición.