¡Coño, tíos! ¿Os podéis creer esta historia? Este tío, Adrian Portelli, estaba literalmente en la ruina hace nada y ahora se pasea por Australia en Lamborghinis como si nada. Yo mismo vi su transformación y aún no me lo creo.
Cuando tenía 29 años, el pobre cabrón solo tenía 400 dólares en el bolsillo y una lista de fracasos empresariales que daba vergüenza. Me recuerda a mí mismo cuando intenté montar mi primer negocio y todo se fue a la mierda.
Lo que más me jode es lo simple que fue su idea. Después de que su web de comparación de precios de coches (LMCT+) fracasara, se le ocurrió sortear un coche para atraer gente. ¡Y los muy listos de las autoridades casi lo joden todo acusándole de juego ilegal! Pero Portelli no es tonto, rápidamente cambió el formato y empezó a "regalar" los coches directamente. Una puta laguna legal que nadie había visto.
En solo dos años, este tío metió 10 millones en anuncios de Facebook. ¿Os imagináis? Mientras todos peleamos por recortar gastos, él tiraba el dinero a mansalva en marketing. Y funcionó, joder. La gente se volvía loca con los sorteos de casas y coches.
Y lo que más rabia me da: tiene un negocio que genera más de 100 millones al año ¡SIN UN SOLO EMPLEADO! Mientras todas estas plataformas tradicionales nos engañan con comisiones y gastos, este tipo montó un chiringuito digital que prácticamente se gestiona solo.
Esto demuestra lo jodido que está el sistema. Las empresas que realmente triunfan hoy no son las que producen algo útil, sino las que manipulan mejor las redes sociales para captar atención. Es una locura cómo un tío puede pasar de estar arruinado a tener una colección de superdeportivos solo por saber vender humo en internet.
Y ahora todos los "gurús" nos venden esta mierda como el modelo a seguir. ¿De verdad queremos un mundo donde el éxito depende más de cuántos seguidores tienes que de lo que realmente aportas?
Pero bueno, no os voy a mentir... yo también intentaría algo así si supiera hacerlo. ¿Vosotros no?
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¡Del fracaso a millonario! El increíble ascenso de Adrian Portelli que nadie vio venir
¡Coño, tíos! ¿Os podéis creer esta historia? Este tío, Adrian Portelli, estaba literalmente en la ruina hace nada y ahora se pasea por Australia en Lamborghinis como si nada. Yo mismo vi su transformación y aún no me lo creo.
Cuando tenía 29 años, el pobre cabrón solo tenía 400 dólares en el bolsillo y una lista de fracasos empresariales que daba vergüenza. Me recuerda a mí mismo cuando intenté montar mi primer negocio y todo se fue a la mierda.
Lo que más me jode es lo simple que fue su idea. Después de que su web de comparación de precios de coches (LMCT+) fracasara, se le ocurrió sortear un coche para atraer gente. ¡Y los muy listos de las autoridades casi lo joden todo acusándole de juego ilegal! Pero Portelli no es tonto, rápidamente cambió el formato y empezó a "regalar" los coches directamente. Una puta laguna legal que nadie había visto.
En solo dos años, este tío metió 10 millones en anuncios de Facebook. ¿Os imagináis? Mientras todos peleamos por recortar gastos, él tiraba el dinero a mansalva en marketing. Y funcionó, joder. La gente se volvía loca con los sorteos de casas y coches.
Y lo que más rabia me da: tiene un negocio que genera más de 100 millones al año ¡SIN UN SOLO EMPLEADO! Mientras todas estas plataformas tradicionales nos engañan con comisiones y gastos, este tipo montó un chiringuito digital que prácticamente se gestiona solo.
Esto demuestra lo jodido que está el sistema. Las empresas que realmente triunfan hoy no son las que producen algo útil, sino las que manipulan mejor las redes sociales para captar atención. Es una locura cómo un tío puede pasar de estar arruinado a tener una colección de superdeportivos solo por saber vender humo en internet.
Y ahora todos los "gurús" nos venden esta mierda como el modelo a seguir. ¿De verdad queremos un mundo donde el éxito depende más de cuántos seguidores tienes que de lo que realmente aportas?
Pero bueno, no os voy a mentir... yo también intentaría algo así si supiera hacerlo. ¿Vosotros no?